Cien días han pasado desde la creación de la sección de Touch de Titanes y, como en política, hacemos balance de estos primeros cien días.
Para analizar este fulgurante comienzo, y aprovechando estas fechas, nos reunimos en una céntrica cafetería con la capitana y con el capitán del equipo, Melani (Mel) y Raúl (Berna), para disfrutar de un buen chocolate caliente con churros y hablar de Touch.
Ambos montan tanto, tanto montan, como Isabel y Fernando. Tras haber disputado el año pasado la 1° liga de Touch, este binomio coge esta temporada las riendas de la capitanía.
Mel nos relata cómo llegó este deporte a su vida por casualidad: “Mi entrenadora en ese entonces me propuso un tipo de rugby alternativo y me presentó a un equipo maravilloso donde poder jugar. Al principio fue muy raro, pero no me arrepiento para nada de haber probado este deporte”. El club la enganchó: “Titanes me ha acogido como a una más en el equipo desde el primer día que llegué a entrenar; son personas maravillosas y me encanta formar parte de este equipo”.
Los inicios nunca son fáciles y Berna nos cuenta sus dudas al comienzo de la temporada: “Al principio tenía miedo porque no sabía quién vendría y si este proyecto saldría adelante. Pero, después de estos meses, me he dado cuenta de que apuntarme a Touch ha sido una de las mejores decisiones que he tomado este año”. Todas esas inquietudes se fueron disipando y dieron paso a una cascada de sentimientos: “Este equipo es increíble y siento que todes hemos conectado muy bien entre nosotres. Me encanta el buen ambiente que se genera cuando estamos juntes y, obviamente, esto también se nota dentro del campo”.
Entre sorbo y sorbo de chocolate, ambos quieren explicar a todas las personas que los vayan a leer qué es el Touch y qué les gusta más de este deporte. Mel es la primera en lanzarse: “El touch es un deporte que llegó para volvernos locos ya que no tiene nada que ver con el rugby al que estamos acostumbrados”. Para Berna, “es difícil definir el Touch en una palabra, es un deporte que entró en nuestro club por sorpresa. Es muy rápido, muy comunicativo y bastante táctico. Pero lo que más me gusta es que es un deporte en equipo, en el touch sin tus compañeros no puedes hacer nada”. Mel quiere destacar un aspecto: “Me gusta que todos somos importantes, tanto dentro del campo como fuera y esa es una sensación increíble”.
Mientras continuamos la conversación y los churros empiezan a desaparecer, entramos en más asuntos deportivos y ambos nos trasladan sus objetivos. “De este año espero poder seguir mejorando a nivel individual y a nivel de equipo, lo bueno de ser nuevs es que solo podemos mejorar y que cada vez vamos siendo mejores. Juntes estamos haciendo y haremos que este equipo sea increíble”, explica Berna mientras Mel secunda sus palabras: “Espero que podamos avanzar mucho más como jugadores y como personas y seguir haciendo lo que me gusta que es jugar”.
Antes de terminar nuestra charla disfrutando las últimas gotas de chocolate, Mel lanza una reflexión final: “El año pasado me tocó ser la única mujer en el equipo, pero este año ya somos más y eso se agradece. Es maravilloso poder compartir el campo con mis compañeras y con mis compañeros, por supuesto”.
Ambos intentan hacer una aportación extra, alagar y agradecer al entrenador su implicación y conocimientos. Pero se nos acabaron los churros y no hay tiempo para más.
Carlos Casas
Entrenador de Madrid Titans
Chocolate, churros y Touch