Hoy es, casi con toda seguridad, uno de los días más importantes dentro del calendario del club; y es que hoy, 19 de febrero, se celebra el día contra la LGTBIfobia en el deporte.

El deporte consiste en competir, en luchar; en intentar mejorar en cada entrenamiento; en tratar de ganar cada partido que jugamos. Pero se basa, sobre todo, en el respeto: respeto por el rival, por el árbitro, por la grada, por los compañeros de equipo… en tanto que la LGTBIfobia se caracteriza por ser lo diametralmente opuesto: odio, intolerancia, machismo, rechazo a los que son diferentes y desprecio por la diversidad. Somos un equipo de rugby que lucha por ganar cada partido, sí; pero, también, por acabar con la cultura machista, homófoba y tránsfoba que, todavía hoy, impera en muchos clubes, entre deportistas o en las gradas de muchos estadios.

Cada domingo saltamos al campo para jugar al rugby y, también, para mandar un mensaje: que el deporte es de todos, es diverso, como la sociedad misma. Nos gustaría que nuestro mensaje de respeto, inclusión y tolerancia llegue a todos aquellos que, cada domingo, vienen a vernos y apoyarnos desde la grada. Pero no queremos quedarnos ahí: queremos que llegue, también, a quienes no se animan a practicar un deporte por miedo a ser víctimas de una agresión o de un insulto homófobo o tránsfobo; por miedo, simplemente, a verse rechazados por ser quienes son. Nos gustaría, también, que nuestro mensaje sirva de ejemplo para los más jóvenes; que entiendan que las actitudes homófobas no aportan nada, ni en el terreno de juego, ni fuera de este.

Todavía hay mucha gente que se pregunta si realmente es necesario poner la etiqueta de inclusivo o LGTBI a un equipo de rugby (o de cualquier otro deporte). Pues bien: en los últimos años, hemos visto al primer árbitro de fútbol que salió del armario dejar el arbitraje, harto de recibir insultos homófobos en el terreno de juego. Hemos conocido multitud de historias de personas trans a las que se aparta de la competición por su condición de transgénero. A dos jugadoras de fútbol profesionales insultadas por hacer pública su relación sentimental… Son solo unos pocos ejemplos, pero son lo suficientemente ilustrativos para concluir que sí, que resulta absolutamente necesario que digamos que somos un club inclusivo, un club LGTBI.
Hoy es un día de reivindicación y, como tal, desde aquí nos gustaría hacer un llamamiento a nuestros gobernantes para que se aprueben las medidas legales oportunas que permitan proteger a las víctimas de agresiones o ataques LGTBIfóbicos; para que la educación en el respeto a la diversidad sea parte obligatoria del currículum académico; para que los insultos homófobos y tránsfobos sean, también, una razón por la que un árbitro pueda detener un partido.

Para terminar, nos gustaría recordaros que este Día Internacional contra la LTGBIfobia en el deporte se conmemora el 19 de febrero coincidiendo con el día de nacimiento en el año 1961 de Justin Fashanu, primer deportista profesional que se atrevió a declarar públicamente su homosexualidad y que, debido a la presión recibida, acabó suicidándose. Por él, por todos aquellos deportistas que no pueden salir del armario por miedo a las consecuencias; por todas las personas trans y género-diversas que tienen que aguantar insultos o situaciones de discriminación. Por la igualdad, el respeto y la diversidad… ¡Vamos, Titanes!