¿Cómo se gana esto? (O al menos, cómo se puntúa y cuándo se acaba)
Ya sabes que en rugby hay posiciones para todos los cuerpos, que el campo tiene más líneas que un guión de “Veneno” y que hay que posar el balón, no lanzarlo. Pero ahora viene la pregunta del millón:
¿Cómo se gana? O mejor dicho: ¿cómo se consiguen puntos? ¿Y cuándo se acaba el partido?
Ponte el bucal, que vamos a explicártelo como si estuviéramos en el tercer tiempo, cerveza en mano y dignidad medio intacta.
¿CÓMO SE PUNTÚA?
En rugby hay varias formas de sumar puntos, unas más épicas que otras, pero todas válidas si sabes lo que haces (o si el rival se equivoca más que tú).
ENSAYO– 5 puntos
La razón por la que corres, te arrastras, te embarras y a veces lloras.
Para conseguirlo, hay que posar el balón en la zona de ensayo rival, con contacto controlado. ¿Qué significa eso? Que si llegas y te tiras cual croqueta sin sujetar el balón, no vale. Si lo lanzas como si marcaras un gol en el FIFA, tampoco. Y si te lo quitan en el último segundo, menos.
Posarlo es bajarlo al suelo, sujetarlo con las manos y tocar el césped. Más literal que eso, imposible.
TRANSFORMACIÓN – 2 puntos
Después del ensayo, te dan la opción de patear a palos desde una línea perpendicular al lugar donde posaste. Sí, si marcas muy en la esquina, la patada será desde la banda. Mala suerte.
Si la pelota pasa entre los dos postes y por encima del travesaño, sumas dos puntitos más. Si no, pues a seguir corriendo.
ENSAYO DE CASTIGO – 7 puntos
No lo has marcado tú, pero casi.
Se concede automáticamente si el árbitro considera que habría habido un ensayo claro, pero el rival lo evitó de forma antideportiva (un placaje alto, una melé colapsada a propósito, etc.).
No se patea ni se debate: te dan los 5 puntos del ensayo + 2 de la transformación, todo junto. Total: 7 puntazos y cara de satisfacción.
GOLPE DE CASTIGO (penalti) – 3 puntos
Cuando el rival comete una infracción (no soltar el balón, entrar mal a un ruck, etc.), el árbitro pita golpe de castigo.
Tú puedes decidir qué hacer: jugar rápido, pedir melé… o patear a palos.
Si eliges patear y aciertas, sumas 3 puntos.
A veces es más práctico que buscar un ensayo si estás lejos o el rival defiende como si fuera el muro de “Juego de Tronos”.
Drop goal – 3 puntos
La opción más fina y menos frecuente, pero si la consigues eres la RuPaul del rugby.
Vas corriendo, de repente sueltas la bola al suelo, esta rebota (sí, tiene que tocar el suelo primero), y la pateas justo entonces, mandándola entre los palos. Si lo haces bien, tres puntos. Si no, pues mira, se intentó.
¿Y CUÁNTO DURA UN PARTIDO?
El rugby XV es un deporte de resistencia… pero con reloj. No es eterno. Aunque en Tercera Regional a veces lo parezca.
Duración oficial:
- Dos tiempos de 40 minutos cada uno.
- Descanso de 15 minutos entre partes (lo justo para hidratarse, curarse una herida emocional o llorar en grupo si vais perdiendo 30-0).
- El reloj se detiene en ciertas ocasiones, como lesiones, cambios, revisión de jugadas o cuando alguien hace una performance digna de los Goya.
Final del partido
Aquí no vale el “cuando el árbitro pita, se acabó”. En rugby el partido no termina hasta que el balón está fuera del juego una vez pasados los 80 minutos.
Es decir: si se está jugando una jugada en el 80:01, no puedes tirar el balón fuera para acabar. Bueno, puedes, pero seguirá hasta que se acabe la acción o alguien saque la pelota del campo.
Y sí, hay partidos que se ganan o pierden en el minuto 82. O 83. O… lo que tarde la épica.
ALGUNOS CONSEJOS VITALES
- No preguntes cuánto queda. Te dirán “quedan 10” y eso puede significar 10 minutos, 10 segundos o 10 latidos del corazón del árbitro.
- No celebres antes de posar el balón. Sí, estamos mirando a esa persona que hizo el ensayo, lo celebró corriendo hacia fuera, y nunca posó.
- Escucha al "Señor" (el árbitro). Él lleva el tiempo, los puntos y tu paciencia.
Rugby XV para dummies: tiempo y puntuación